Las justas deportivas para estudiantes deberían ser durante tiempo mas prolongado, que enfrente a las instituciones educativas por mas tiempo que el estipulado para cumplir con el programa nacional y asi se puede suplir una gran falencia municipal de masificación deportiva.
Los mas de veinte millones de pesos que anualmente se gastan en cumplir durante dos semanas en las finales departamentales en Cúcuta serían mejor invertidos en un proyecto municipal que le permita un mayor fogueo al deportista-estudiante y le permita a los clubes deportivos cumplir con los preceptos del decreto 1228 reglamentario de la Ley 181 de 1995 que establece la creación de los mismos e igualmente los comités deportivos.
Volver por los caminos donde los colegios se enfrentaban en franca lid incluso en partidos de ida y vuelta en los deportes que mas se puedan, las jornadas deportivas en salto largo, pruebas de pista en el Estadio e incluso retomar el mejor uso de la piscina olímpica, serían un gran reto para esta administración que se ha ufanado de propender por un deporte mas confiable y participativo.
Los Rectores y directores de los establecimientos educativos deberán entender su gran compromiso de fijar políticas claras para la práctica deportiva en sus instituciones y aunar esfuerzos para que incluso recursos privados sean negociados en partes iguales para el logro de implementación, pago de entrenadores, estímulo a los edufísicos, garantizaría el cumplimiento del objetivo.
Seguir en la misma tónica anual de cumplir un programa nacional que no este acompañado de una política municipal de talentos y escuelas de formación de la mano de los clubes deportivos, es seguir malgastando recursos económicos, físicos y logísticos.
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